PRECIOSA SEMILLA

  I.Origen Para profundizar en esta famosa celebración debemos mirar hacia las antigüas culturas celtas y su festejo llamado Samhain (fin del verano), dicha celebración se daba a finales de octubre, duraba 3 días y era la fiesta con que despedían el verano y le daban entrada al otoño en el cual los días se volvían cortos, fríos y oscuros. Estas culturas conmemoraban el final de la cosecha rindiéndole culto a Lugh, dios del sol. Así se hacía cada año en los pueblos celtas, de hecho ese festival marcaba el fin del año celta. Se celebraba entre culto a ese dios y prácticas de futurología y adivinación, se leían las cáscaras de nuez por ejemplo; el samhain (que se pronuncia sow-in) incluía lo que entendían ellos como ofrendas a los espíritus de los muertos, por esa causa dejaban comida y dulces a las entradas de las casas. Y como pensaban que durante esos días los espíritus de los muertos andaban errantes, también encendían velas para iluminarles el camino hacia el descanso junto al ...

Dios suele hacer promesas no sólo a sus hijos, sino a la humanidad entera, de hecho Cristo fue el cumplimiento de la promesa que ya desde tiempos antigüos (aún la había preparado desde antes de la fundación del mundo) había establecido para redención del mundo. Pues bien, estas promesas de Dios, firmes y maravillosas nos pueden someter a espera, a un tiempo en el cual no veremos viento ni lluvia, hasta que por la fe y la paciencia, alcancemos las tales promesas. ¿Qué implica eso? ¿Qué nos hace estar sin perder la fe o desistir? Hoy veremos lo poderosa de la fe y lo necesaria de la paciencia, la cual es antes de obtener efectivamente la promesa. (Le puede interesar: el justo por fe vivirá, míralo dando click aquí  ) Te invito a oír este podcast de la plabra: Querido amigo, una vez has escuchado este mensaje, el llamado de Dios sigue estando ahí para ti. Si quieres hacer una oración de fe para recibir a Jesucristo como tu Señor y Salvador puedes hacer la siguiente oración. Pero te ad...

No es una sensación agradable en la vida cristiana ser probados, de hecho la prueba se caracteriza por ser algo duro, algo que nos afecta en alguna medida, sin embargo, el creyente debe saber que la misma prueba produce ciertos frutos en la vida del probado, y entre ellos, hoy veremos por la palabra cómo produce compasión y consecuentemente, justicia. Así pues que cuando seamos probados no sólo podemos pensar en los beneficios personales (aunque sea duro), sino también en lo que el Señor hará a través de ese trato, en la vida de otros, usándonos a nosotros como instrumentos que han adquirido por su gracia y misericordia un cada vez más excelente y eterno peso de gloria. Te invito a oír el siguiente podcast de la palabra: Querido amigo, una vez has escuchado este mensaje, el llamado de Dios sigue estando ahí para ti. Si quieres hacer una oración de fe para recibir a Jesucristo como tu Señor y Salvador puedes hacer la siguiente oración. Pero te advierto: De nada servirá si no la haces co...

Continuando con este mensaje, observamos la reacción de Naamán que fue por haber sido golpeado en su orgullo, en su ego; en la disposición de Dios, le permitió que pese a su enojo e indignación se sometiera a la palabra dada por Dios y así fue como adquirió el conocimiento de Dios y su limpieza, la regeneración que también Cristo opera en el pecador por el lavamiento de la regeneración por el Espíritu Santo (Tito 3:5).  El gran tesoro que este hombre Naamán encontró no fue su sanidad ni la arena del río Jordán que llevó a su país, el verdadero y excelente tesoro es el conocimiento de Dios, ese entendimiento claro y profundo de la realidad de Dios en su trato personal con cada vida, ese entendimiento que es el que transforma las vidas, por el cual Pablo dijo: " Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo" Filipenses 3:8 ¿Cómo...

El precio de la sanidad y -lo más valioso- del conocimiento de Dios que Naamán tuvo que pagar fue el de despojarse de su orgullo y de su soberbia y de someterse a la Palabra que Dios había dado a través de su siervo el profeta Eliseo, cuando él hizo conforme a ello, él vio el poder de Dios en su vida ¿Por qué nos cuesta tanto pagar ese precio? Porque la naturaleza humana es reacia a acatar la voluntad de Dios y quiere hacer la suya propia; y también porque el engaño del pecado nos hace mirar el uniforme de General, la estima ante los hombres, todo aquello de que nos podamos gloriar, pero no vemos que en realidad somos unos leprosos necesitados de Dios.  Naamán tenía una idea preconcebida de cómo Dios le sanaría, pero el problema es que esa idea se volvió un capricho, tanto así que estuvo dispuesto a rechazar la sanidad por no ser a su manera. Debemos entender que es a la manera de Dios, no a la nuestra.(Antes vimos: El fruto del arrepentimiento y, la humildad ). Te invito a oír es...